Comenté que quería poner algo más en este hilo y así será. Tengo que meterme en la cabeza que debería sacar fotos cuando voy a los sitios si luego posteo aquí, pero bueno, paso a paso.
Esta semana he ido a varios sitios de Madrid y dejo una reseña aquí de uno que tenía que conocer (Ambu), uno del que no había oído hablar nunca (WOLFØX) y otro local que ya conocía pero bajo otros dueños (Geisha Coffee).
Quiero empezar con el mejor de largo:
Geisha Coffee. Ahí hay nivel y café de Coffea Circulor, que desde los post de El Edu ahora parece que me persigue
Quería probar el filtro y estaban poniendo uno del propio Coffea Circulor, un gesha de Perú si no recuerdo mal. Hacen el filtro en un par de máquinas Xbloom que tienen ahí, que me parece buena idea, la verdad, y más en Madrid centro. Es el mejor filtro que he tenido en mucho tiempo en una cafetería y creo que el uso de la Xbloom tiene mucho que ver. Es muy difícil sacar un filtro en una cafetería, es más difícil si está entrando gente todo el rato, y estos chicos creo que han dado con la clave. De verdad que estaba genial, como hecho en casa con buena agua, cuidado y varios intentos.
Además, venden café tostado por ellos. Este tema lo desarrollaré en el del Café del Día cuando toque, pero me llevé un café muy interesante (SL-28 de Costa Rica lavado... casi 'ná' lo que tenían ahí) y tenían una oferta preciosa... porque todos eran lavados

(si me habéis leído por el foro sabréis por dónde tiro con los cafés).
Poco más que decir. Volveré más pronto que tarde, que no he probado el espresso. Además, los baristas eran geniales, ojalá pillarles con poca clientela otro día. Muy, muy agradables y profesionales.
Como me gustan los contrastes, paso a la mayor decepción:
Ambu. Fui al local de Malasaña porque el de Chueca, que parecía más enfocado a hacer buen café por los comentarios que he leído por aquí y por el 'Coffee Lab' que añadieron al nombre del local, está cerrado. El de Malasaña es lo que puedes esperar de una cadena que abrió en 2021 y ya ha multiplicado sus locales: café proveniente de un verde que no merece la pena, una oferta pobre, el filtro 'bueno' costaba... ¡15 pavos! (y era peor, en papel, que el que tomé en Geisha Coffee por menos de la mitad. En la práctica tengo 0 dudas de que también hubiera sido peor) y, como suele ser costumbre, venden cafés de otras marcas con un sobreprecio enorme y el espresso 'bueno' (no me lo parecía) tiene sobrecoste. El local es bonito y me han dicho que es muy popular entre instagrammers, por lo que diría que ese es el negocio al que están dirigidos, y poco más. De aquí probé el espresso, un colombiano que podría estar perfectamente en un molino de La Mexicana, y un bizcocho también más caro de lo que debería. Aprovecho, ya que estoy, para recomendar el (también carillo) bizcocho de limón de Hola Coffee, que ese sí merece la pena.
No tengo pensado volver, la verdad. Si reabren el 'coffee lab' con el barista (¿Chema?) que comentaba por aquí Edu, iría a ese. Pero solo ese local bajo esa circunstancia.
Por último fui a
WOLFØX, un sitio que no sabía ni que existía, pero curiosamente es el mejor localizado de los tres. El local es pequeño y el barista, un hombre joven argentino, sabe muy bien lo que hace. Quería un espresso para llevar y ha sido el mejor que he tomado en muchos años. Éste sí era un café cuyo verde merecía la pena y un barista que sabía / quería sacarle algo más. De verdad que era perfecto. Recomiendo pedirles un espresso si pasáis por delante, al menos si veis al barista que os digo. Eso sí, por la zona y el tamaño del local, no me arriesgaría a pedirles algo que necesite una preparación mayor.
Volveré a pedirles un espresso cuando pase por la zona, sin duda.