- 20 Dic 2018, 09:04
#15040
Calvas sí calvas no... Lo he dicho muchas veces, cafés con mala pinta no suelen ir acompañados de buenos atributos. Puede que el sabor no esté del todo mal, puede incluso que esté bueno, pero es difícil que vayan a tener una mínima untuosidad y la textura en el espresso me parece importante. A veces dan más la impresión de un café de filtro corto y algo desiquilibrado que de un espresso. También es cierto que el hecho de tener buena presencia no es sinónimo de que me vaya a gustar. El de la foto no sé cómo estaría, a pesar de la calva la textura de la crema no parece mala, nada que ver con esas cremas pálidas y aireadas, y con calvas también, del café típico de máquina de vending. Si como dices la taza es grande, es fácil que ocurra. No me disgustan las tazas anchas aunque no sean buenas para la foto, jajaja, en D’Origen no son pequeñas las que utilizan y la crema en ocasiones también queda a los lados pero la textura es excelente y el espresso cremoso. No tiene nada que ver con la terrible imagen de los cafés de bar quemados, esos en los que esa calva parece el cráter de un volcán y la crema de los alrededores tiene ese aspecto grisáceo y sospechoso que pone los pelos de punta.
El Laos de Puchero me suena en principio más peligroso que el Salvador de Right Side, jajajaEl Edu escribió: ↑19 Dic 2018, 15:09Mañana cafetera que ha dado mucho de sí.
En primer lugar visita a La Colectiva
En los molinos, un Laos Setapoung Village de Puchero y el Café de Navidad de Right Side, un El Salvador de Chalatenango, variedad Pacamara y procesado Honey con 12 horas de fermentación acética.
Como me va el peligro, pido el segundo.
Muy buena presencia en taza, buena crema y cuerpo medio alto. Equilibrado y sin estridencias. Tal vez un poco falto de brillantez. Excelente postgusto y muy duradero.
Con muy buen sabor de boca, me acerco a Masters. En un molino el Nensebo de Coutume que ya probé y, en el otro, un Colombia, Huila, de las variedades Caturra, Castillo, lavado, del tostador holandes Manhattan Coffee Roasters, tostado para espresso por petición de Manuel.
Me lo pone doble
Acidez muy agradable, dulce y equilibrado. Postgusto muy bueno aunque no tan largo como me gustaría.
La charla con Manuel muy entretenida e instructiva. Le pregunto sobre el porcentaje de usuarios que le ponen azúcar y me dice que un 60% aunque ha habido momentos que era casi el 95%. No se declara anti azúcar radical.
Me habla muy bien de dos cafés que entrarán pronto en los molinos, un Burundi Buziraguhindwa, de Five Elephant que, aunque lo tuestan habitualmente como omni, el lo ha pedido para espresso,
y un Costa Rica Marvin's Milenio, de la variedad Milenio y que asegura que, por potencial de calidad y de rendimiento, puede ser la variedad del siglo.
Volveré para probarlos. Lo mejor, sin duda, la charla y el intercambio de opiniones.
Para comprobar de primera mano lo comentado por @PCJAnt sobre la "Rise and fall" de algunos lugares míticos, me he acercado a Hanso.
Tenían un Etiopía Adola by Israel Degfa, de la región Guji, variedad Heirloom lavado de Bonanza, Berlín.
Antes de que nadie rompa lanzas, debo decir que el tiempo transcurrido entre que lo han tirado y la foto ha sido inferior a un minuto. Y el resultado ha sido este
Es cierto que la taza enorme no favorece para nada la formación de crema pero, entonces, ¿por qué la utilizan?
He aguantado un primer impulso que me invitaba a devolverlo y lo he probado. Me ha parecido mejor que lo que el aspecto dejaba entrever pero no ha sido una maravilla.
Llego a casa y me tomo un Yemen tirado con el filtro "The Single" con 7,5 gramos para 17 en taza.
Aunque me gusta menos que los tirados con el filtro doble, puede que no sea el mejor de los cuatro pero, desde luego, no es el peor.
Calvas sí calvas no... Lo he dicho muchas veces, cafés con mala pinta no suelen ir acompañados de buenos atributos. Puede que el sabor no esté del todo mal, puede incluso que esté bueno, pero es difícil que vayan a tener una mínima untuosidad y la textura en el espresso me parece importante. A veces dan más la impresión de un café de filtro corto y algo desiquilibrado que de un espresso. También es cierto que el hecho de tener buena presencia no es sinónimo de que me vaya a gustar. El de la foto no sé cómo estaría, a pesar de la calva la textura de la crema no parece mala, nada que ver con esas cremas pálidas y aireadas, y con calvas también, del café típico de máquina de vending. Si como dices la taza es grande, es fácil que ocurra. No me disgustan las tazas anchas aunque no sean buenas para la foto, jajaja, en D’Origen no son pequeñas las que utilizan y la crema en ocasiones también queda a los lados pero la textura es excelente y el espresso cremoso. No tiene nada que ver con la terrible imagen de los cafés de bar quemados, esos en los que esa calva parece el cráter de un volcán y la crema de los alrededores tiene ese aspecto grisáceo y sospechoso que pone los pelos de punta.