Tengo el Sette 270Wi desde hace cuatro años y medio y solo había tenido un problema de lo que Baratza llamaba “Macro drifting”, pero me ocurrió con un café particularmente duro y, aunque me dieron la posibilidad de reparación en garantía, como no me volvió a ocurrir, seguí con él sin más problemas.
Desde hace unos días el nivel de vibración y ruido había crecido significativamente por lo que decidí desmontarlo para comprobar que me ocurría lo que a otros compañeros. Y, en efecto, el dentado de la rueda principal del planetario y su correspondiente en la mal llamada Gearbox estaban deformados/desgastados.

Como tengo tres molinos y necesito un hueco en la encimera para poner una Ninja Creami que anda de un sitio para otro, me plantee ponerlo a la venta en el foro, más que otra cosa para que algún compañero lo pudiera aprovechar. Para ello debía arreglar el Sette para entregarlo como nuevo. Sabía que en otras ocasiones Juan, de ecafe, había conseguido la pieza, pero, como ya no trabaja con ese molino, no le quise molestar y lo pedí donde más barato la encontré, en Alemania. He cambiado solamente la cabeza, no el motor.
Ayer me llego

y hoy la he sustituido siguiendo la guía de Baratza, que está muy clara y detallada, y el molino ha quedado como el primer día.

Como he comentado en alguna ocasión, mi pareja toma café con leche por la mañana y no está dispuesta a pesar ni a jugar con trasvases de café molido y, por eso, utiliza el Sette, pero estos días lo ha tenido que hacer porque ha molido con el Arco.

Con el Sette arreglado hemos tenido esta conversación:
- ¿Qué pensabas hacer con el molino?
- Venderlo
- ¿Por cuánto?
- No sé, 200 o 250€
- Déjate de tonterías. Te doy cuatrocientos y se queda en casa (por supuesto, no me los ha dado).
Y aquí se va a quedar. Si dentro de otros cuatro o cinco años tengo que repararlo otra vez, por 43€ me compensa. Y más a ella, por facilidad de uso, comodidad, limpieza, tiempo, etc.
La Ninja seguirá a medio esconder.
Entre aconsejar bien y aconsejar mal hay un honrado término medio: no dar consejos