- 07 Feb 2020, 14:51
#26960
De los creadores de “Las aventuras del hípster argentino” y publi-reportajes como “Ya compra la maldita moccamaster” llega esta nueva revisión sobre la botella de Hario para Cold Brew.
“Innecesaria” como tantas cosas que compramos para esta afición, pone las cosas muy fáciles para el cold brew que tanto se disfruta en estas fechas, por estas latitudes.
De por sí este sistema es muy amigable porque no necesita mucho más que cualquier recipiente donde infusionar el café y un filtro de papel.
El asunto se pone sin embargo algo tedioso al momento de filtrar.
Yo venia utilizando como recipiente una prensa francesa grande, y facilitaba las cosas con su “primer filtrado”, aunque luego el filtrado en papel es inevitable y es un proceso que lleva su tiempo.
Los señores japoneses de Hario lo han resuelto de excelente manera con esta botella que se ensambla al filtro.
Hay en realidad muchas versiones de distintas marcas, pero el tema del filtro resulta crucial para que quede con la menor cantidad posible de posos la bebida.
No se como estará de precio allá, pero en mi caso comprándolo desde USA el precio estaba prácticamente igual que versiones “chinas” (y a buen precio incluso, aunque resignando algo de capacidad, ya que es de 650 ml y las otras vienen más grandes, en mí caso me parece buena medida) y no quise arriesgar, ya que confiaba en la marca.
Confieso que tenía mis dudas sobre si no necesitaría de todos modos filtrar en papel al final, pero me ha sorprendió gratamente ya que sale una bebida muy limpia (incluso más que con mi método anterior) sin necesidad de hacer nada mas que retirar el filtro.
Evidentemente esta bien diseñado y es de calidad.
Moliendo lo suficientemente grueso no hay necesidad de hacer nada más que pesar el café (utilizo como punto de partida 1:10, pero el cold da juego para ir probando en base a los cafés o gustos) encastrar el filtro, llenarlo de agua y finalmente, luego de la dulce espera (en mi caso suelo tenerlo unas 14 horas) sacar el filtro y "ordeñarlo un poco" para no perder bebida.
Aunque la ventaja principal está en la comodidad y que salgan las tazas bien limpias, un punto a favor es que el café queda todo el tiempo sumergido y en contacto con el agua en forma íntegra (con otros recipientes, si bien estará en contacto, el café terminará flotando arriba y la extracción no será igual).
Creo que le da un plus en la extracción y salen los matices muy bien definidos.
Aquí algunas fotos
“Innecesaria” como tantas cosas que compramos para esta afición, pone las cosas muy fáciles para el cold brew que tanto se disfruta en estas fechas, por estas latitudes.
De por sí este sistema es muy amigable porque no necesita mucho más que cualquier recipiente donde infusionar el café y un filtro de papel.
El asunto se pone sin embargo algo tedioso al momento de filtrar.
Yo venia utilizando como recipiente una prensa francesa grande, y facilitaba las cosas con su “primer filtrado”, aunque luego el filtrado en papel es inevitable y es un proceso que lleva su tiempo.
Los señores japoneses de Hario lo han resuelto de excelente manera con esta botella que se ensambla al filtro.
Hay en realidad muchas versiones de distintas marcas, pero el tema del filtro resulta crucial para que quede con la menor cantidad posible de posos la bebida.
No se como estará de precio allá, pero en mi caso comprándolo desde USA el precio estaba prácticamente igual que versiones “chinas” (y a buen precio incluso, aunque resignando algo de capacidad, ya que es de 650 ml y las otras vienen más grandes, en mí caso me parece buena medida) y no quise arriesgar, ya que confiaba en la marca.
Confieso que tenía mis dudas sobre si no necesitaría de todos modos filtrar en papel al final, pero me ha sorprendió gratamente ya que sale una bebida muy limpia (incluso más que con mi método anterior) sin necesidad de hacer nada mas que retirar el filtro.
Evidentemente esta bien diseñado y es de calidad.
Moliendo lo suficientemente grueso no hay necesidad de hacer nada más que pesar el café (utilizo como punto de partida 1:10, pero el cold da juego para ir probando en base a los cafés o gustos) encastrar el filtro, llenarlo de agua y finalmente, luego de la dulce espera (en mi caso suelo tenerlo unas 14 horas) sacar el filtro y "ordeñarlo un poco" para no perder bebida.
Aunque la ventaja principal está en la comodidad y que salgan las tazas bien limpias, un punto a favor es que el café queda todo el tiempo sumergido y en contacto con el agua en forma íntegra (con otros recipientes, si bien estará en contacto, el café terminará flotando arriba y la extracción no será igual).
Creo que le da un plus en la extracción y salen los matices muy bien definidos.
Aquí algunas fotos