- 05 Mar 2024, 14:21
#70090
Tras varias semanas en el foro, leyendo mucha información, conociendo la experiencia de muchos otros iniciados y sobre todo haciendo caso de aquellos que han pasado antes por donde transitamos los nuevos, he llegado a ese ansiado punto en el que he sacado el primer espresso de mi máquina que me ha dejado verdaderamente satisfecho. Primera vez en mi vida que tomo un café sin azúcar y disfruto de su sabor y cremosidad.
Para llegar a este punto he seguido tres pasos muy sencillos que están al alcance de la mano de cualquiera:
1. Cosas necesarias. Este punto es uno de los más, sino el más tratado en el foro: ¿Qué necesito para hacer un espresso en casa? Y es muy fácil, todo está en la guía de iniciación disponible aquí en el foro. Una guía que es estupenda, muy útil y se lee rápido, por cierto. Y no, no es necesario gastarse miles de euros en material caro. Yo en un par de meses he reunido mi humilde set por poco más de 150 euros una Dedica, portafiltros sin fondo, tamper, algunas cosas más.. pero sin duda y más importante que todo eso está el molino. Porque sí amigos "SIN MOLINO NO HAY ESPRESSO". Tengo un Ascaso I1 que es suficiente para empezar, pero sin molino no hay espresso que valga. Si acabáis de empezar buscad primero molinillo que lo demás es secundario.
2. Técnica. De nada sirve tener material si no se sabe usar. Yo trabajé en mi juventud de camarero más de 10 años, manejaba una Rancilio de pistones y no tenía ni idea. Me enseñaron a hacerlo mecánicamente y ha sido ahora, 25 años después cuando comprendo el proceso. Y recuerdo ese café torrefacto negrísimo que había disponible. Hay información de sobra en este foro y en internet sobre tipos de café, ratios, tiempos, preparación de la pastilla. Todo aprendizaje lleva su proceso, y el de hacer un buen café no es algo que esté reservado a una élite, en el fondo es sencillo si tenemos en cuenta el tercer punto...
3. Paciencia. De nada sirve todo lo anterior si lo que queremos es correr. Si no nos atrae el proceso, y sólo queremos el sabor, mejor una super automática. Pero si le dedicamos el tiempo que necesita encontrar el punto de molienda, preparar la pastilla adecuada, cremar la leche en su punto... llega la recompensa. Con su cola de ratón, su crema y su agradable sabor.
Y eso que yo aun me considero muy lejos de hacer un buen espresso, pero sin duda ya hago espresso, y por ahí es por donde se empieza. Ánimo a todos, especialmente a los nuevos, y disfrutad del café.
Para llegar a este punto he seguido tres pasos muy sencillos que están al alcance de la mano de cualquiera:
1. Cosas necesarias. Este punto es uno de los más, sino el más tratado en el foro: ¿Qué necesito para hacer un espresso en casa? Y es muy fácil, todo está en la guía de iniciación disponible aquí en el foro. Una guía que es estupenda, muy útil y se lee rápido, por cierto. Y no, no es necesario gastarse miles de euros en material caro. Yo en un par de meses he reunido mi humilde set por poco más de 150 euros una Dedica, portafiltros sin fondo, tamper, algunas cosas más.. pero sin duda y más importante que todo eso está el molino. Porque sí amigos "SIN MOLINO NO HAY ESPRESSO". Tengo un Ascaso I1 que es suficiente para empezar, pero sin molino no hay espresso que valga. Si acabáis de empezar buscad primero molinillo que lo demás es secundario.
2. Técnica. De nada sirve tener material si no se sabe usar. Yo trabajé en mi juventud de camarero más de 10 años, manejaba una Rancilio de pistones y no tenía ni idea. Me enseñaron a hacerlo mecánicamente y ha sido ahora, 25 años después cuando comprendo el proceso. Y recuerdo ese café torrefacto negrísimo que había disponible. Hay información de sobra en este foro y en internet sobre tipos de café, ratios, tiempos, preparación de la pastilla. Todo aprendizaje lleva su proceso, y el de hacer un buen café no es algo que esté reservado a una élite, en el fondo es sencillo si tenemos en cuenta el tercer punto...
3. Paciencia. De nada sirve todo lo anterior si lo que queremos es correr. Si no nos atrae el proceso, y sólo queremos el sabor, mejor una super automática. Pero si le dedicamos el tiempo que necesita encontrar el punto de molienda, preparar la pastilla adecuada, cremar la leche en su punto... llega la recompensa. Con su cola de ratón, su crema y su agradable sabor.
Y eso que yo aun me considero muy lejos de hacer un buen espresso, pero sin duda ya hago espresso, y por ahí es por donde se empieza. Ánimo a todos, especialmente a los nuevos, y disfrutad del café.
- By Jeseam
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